La adquisición, procesamiento y difusión del conocimiento médico ha cambiado en los últimos años. La medicina basada en la experiencia de un solo médico ha sido invalidada por la medicina basada en evidencia1, en el estudio sistemático y científico de los hechos, de tal forma que todo lo que se dice en cualquier foro académico y científico (incluso en una clase, un congreso o frente a un paciente) está sujeto a comprobación por parte del auditorio y las discusiones más ricas las gana el que tiene el artículo de mayor peso científico o la mayor calidad de evidencia. DOI: 10.24875/RME.20000002